Iglesias románicas del Camino entre Sarria y Santiago
El Camino Francés en Galicia no solo es una ruta espiritual, sino también un auténtico museo al aire libre. Entre Sarria y Santiago de Compostela, el peregrino se encuentra con algunas de las iglesias románicas más hermosas y mejor conservadas de la región. Estos templos, construidos entre los siglos XI y XIII, son testimonio de la fe, la hospitalidad y el arte que definieron la Edad Media.
Pequeñas ermitas rurales, iglesias parroquiales y santuarios se alzan junto al Camino, integrados en paisajes de bosques, valles y aldeas. Cada una guarda su propia historia y su propia magia.
➤ Santa Mariña de Sarria: el inicio espiritualLa iglesia de Santa Mariña, patrona de la villa, es uno de los primeros templos que el peregrino encuentra al comenzar su recorrido en Sarria. Su origen románico se conserva en la portada y en los capiteles decorados con motivos vegetales. Desde su campanario, se obtiene una vista privilegiada del casco antiguo y del río Sarria.
- Ubicación: en el centro histórico de Sarria.
- Destacan sus canecillos y portada románica.
- Punto habitual para obtener el primer sello de la credencial.
El templo de San Nicolás de Portomarín, también conocido como San Juan, es uno de los iconos del Camino Francés. Construido en el siglo XII por los caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén, combina el estilo románico con una estructura defensiva. Cuando se construyó el embalse de Belesar en los años 60, la iglesia fue trasladada piedra a piedra desde su emplazamiento original, hoy bajo las aguas del Miño.
- Ejemplo de románico fortificado único en Galicia.
- Fachada principal con rosetón y esculturas de gran detalle.
- Testimonio de la historia y resistencia del pueblo de Portomarín.
El templo de San Tirso es uno de los grandes referentes del románico gallego. Aunque ha sufrido reformas, conserva una portada románica del siglo XII con arquivoltas esculpidas y un tímpano decorado. Palas de Rei fue durante siglos un importante enclave jacobeo, y su iglesia refleja la importancia religiosa y artística de la zona.
- Arquitectura sobria con influencias compostelanas.
- Fachada principal del románico tardío.
- Tradición de bendición al peregrino en su camino a Santiago.
En pleno corazón de Melide se alza Santa María de Melide, una de las iglesias románicas más bellas del Camino Francés. Construida en el siglo XII, destaca por su ábside semicircular decorado con canecillos, su rosetón y su interior de piedra desnuda que transmite serenidad. En su interior se conservan frescos góticos y un retablo barroco de gran valor.
- Declarada Monumento Nacional en 1931.
- Frescos policromados y cruceiro anexo al templo.
- Parada imprescindible para los amantes del arte sacro.
En el tramo entre Arzúa y O Pedrouzo, la pequeña capilla de Santa Irene ofrece uno de los lugares más simbólicos del Camino. Según la tradición, su fuente tiene propiedades curativas y se asocia con la leyenda de la joven mártir portuguesa que da nombre al lugar. Su estructura sencilla, de piedra y teja, es ejemplo del románico rural gallego adaptado al entorno natural.
- Arquitectura popular con detalles románicos.
- Fuente considerada de aguas milagrosas.
- Entorno de bosque y calma, ideal para la reflexión.
Aunque fuera del tramo Sarria–Santiago, la iglesia de O Cebreiro merece mención especial. Es uno de los templos más antiguos del Camino, construido en el siglo IX y de estilo prerrománico. En su interior se conserva el cáliz del famoso milagro eucarístico del Santo Grial gallego. Este templo marcó el modelo arquitectónico que inspiró muchas iglesias del tramo gallego posterior.
- Arquitectura prerrománica en piedra de montaña.
- Sede del Milagro del Cebreiro, símbolo jacobeo.
- Punto de entrada del Camino Francés a Galicia.
El recorrido entre Sarria y Santiago de Compostela está salpicado de templos que conservan la esencia del románico gallego: muros de piedra, portadas decoradas y campanarios humildes que acompañan al peregrino en su camino espiritual. Estas iglesias, muchas aún en uso, son parte de la identidad cultural y espiritual de Galicia.
Caminar por el Camino es también un viaje por la historia del arte y la fe, donde cada iglesia representa una página viva del pasado.
Descubre las iglesias románicas del Camino entre Sarria y Santiago y conecta con la historia milenaria que guía a los peregrinos desde hace siglos.