Camino Francés desde Sarria: cómo preparar a tu perro para la ruta
Hacer el Camino Francés desde Sarria con tu perro puede ser una de las experiencias más gratificantes que vivas. No solo compartirás contigo una de las rutas más emblemáticas del Camino de Santiago, sino que disfrutarás de la naturaleza gallega, los pueblos rurales y la convivencia con otros peregrinos, todo junto a tu compañero más fiel.
Sin embargo, para que la experiencia sea positiva, es esencial preparar al perro física, mental y logísticamente. El Camino no es solo un paseo: supone varios días de caminatas, climas cambiantes y nuevos estímulos. Con la preparación adecuada, tu mascota podrá disfrutar tanto como tú.
➤ Evalúa si tu perro está preparadoAntes de planificar el viaje, consulta con tu veterinario para asegurarte de que tu perro está en condiciones de realizar el recorrido. No todos los perros son aptos para largas caminatas: la edad, la raza, el peso y la salud general influyen mucho.
Los perros jóvenes, activos y acostumbrados a caminar son los que mejor se adaptan. Las razas de gran tamaño o de hocico corto (como bulldogs o carlinos) pueden tener más dificultades, sobre todo con el calor.
- Consulta al veterinario al menos un mes antes del viaje.
- Asegúrate de que tiene todas las vacunas y la desparasitación al día.
- Verifica su resistencia haciendo caminatas progresivas antes del Camino.
El Camino Francés desde Sarria tiene unos 115 kilómetros que, normalmente, se recorren en 5 o 6 días. Tu perro también necesitará preparación para acostumbrarse a caminar largas distancias. Empieza con paseos diarios más largos y, poco a poco, añade peso o subidas.
Si tu perro no está habituado a caminar por distintos terrenos, dedica tiempo a entrenarlo sobre superficies de tierra, piedra o hierba, similares a las del Camino. Esto fortalecerá sus patas y evitará lesiones.
- Aumenta progresivamente la distancia de los paseos.
- Haz descansos frecuentes y observa su comportamiento.
- Practica rutas de medio día antes del viaje.
- Acostúmbralo a llevar su propio arnés y mochila ligera (si la usa).
Al igual que el peregrino, el perro debe viajar ligero, pero con todo lo necesario para su bienestar. Existen mochilas o bolsas diseñadas especialmente para ellos, aunque lo ideal es que tú lleves la mayor parte del peso.
- Arnés cómodo (mejor que collar) y correa resistente.
- Comedero y bebedero plegables.
- Botiquín canino básico (gasas, suero, pinzas, antiséptico, protector de almohadillas).
- Toalla ligera y bolsa para recoger excrementos.
- Pienso o comida habitual (para evitar trastornos digestivos).
- Identificación y microchip obligatorios.
- Cartilla veterinaria actualizada.
También puedes incluir un chaleco reflectante o una luz LED para las primeras horas de la mañana o el atardecer. Galicia es verde y húmeda, así que un pequeño impermeable para perros puede ser útil.
➤ Cuida sus patas: su herramienta más valiosaEl Camino de Santiago atraviesa terrenos variados: asfalto, grava, tierra y caminos empedrados. Las almohadillas de tu perro deben estar preparadas para resistir varios días de caminata. Durante las semanas previas, puedes aplicar crema endurecedora o bálsamos naturales para fortalecerlas.
En el Camino, revisa sus patas cada noche. Si notas grietas o heridas, lava con agua y jabón neutro, seca bien y aplica protector. Si el terreno está muy caliente o áspero, valora el uso de botines protectores.
- Aplica crema protectora antes y después de cada etapa.
- Limpia y seca bien las patas al final del día.
- Evita etapas con demasiado asfalto o piedras si notas molestias.
Los perros necesitan más agua de lo que imaginamos, especialmente en días calurosos. Lleva siempre una botella extra para él y ofrécele agua cada 30–45 minutos. Evita que beba en ríos o charcas, ya que pueden contener bacterias o parásitos.
Durante la caminata, haz paradas frecuentes a la sombra. Los perros regulan peor el calor que los humanos, por lo que un descanso a tiempo puede evitar un golpe de calor.
- Lleva agua fresca y un cuenco portátil.
- Evita caminar en las horas centrales del día (12:00–17:00).
- Permítele descansar en zonas tranquilas y frescas.
- Por la noche, asegúrate de que tenga un lugar cómodo para dormir.
El tramo entre Sarria y Santiago cuenta cada vez con más alojamientos pet friendly: albergues privados, hostales y casas rurales que aceptan perros. Es importante reservar con antelación y confirmar las condiciones: algunos permiten solo perros pequeños, otros cobran un pequeño suplemento.
Al llegar a cada etapa, busca un lugar donde tu perro pueda descansar bajo techo, lejos del ruido y el frío. Recuerda que, aunque sea un buen compañero de viaje, también necesita su propio descanso.
- Consulta previamente los alojamientos que admiten mascotas.
- Evita dejar al perro solo o atado en el exterior.
- Respeta las normas de convivencia y limpieza en cada lugar.
El Camino Francés desde Sarria es seguro para recorrer con perros, pero conviene mantener precauciones básicas. Llévalo siempre con correa, especialmente al cruzar carreteras o en zonas con otros animales. Recoge sus excrementos y mantén una actitud respetuosa hacia los demás peregrinos y la naturaleza.
Recuerda que algunos alojamientos y transportes no admiten mascotas, por lo que es recomendable organizar bien las reservas y, si es necesario, contar con el apoyo de una agencia especializada.
- Usa correa corta en zonas urbanas y larga en caminos rurales.
- No permitas que moleste a otros peregrinos o animales.
- Lleva siempre bolsas para limpiar detrás de él.
Hacer el Camino de Santiago con tu perro es más que un viaje: es una experiencia compartida que refuerza el vínculo entre ambos. Cada etapa es una lección de paciencia, confianza y compañía. Tu perro te recordará que no hace falta correr, que el presente se disfruta paso a paso y que la felicidad está en el camino, no solo en la meta.
Cuando lleguéis a Santiago de Compostela, no habrá una Compostela para él, pero sí un recuerdo imborrable: el de haber caminado juntos hacia un mismo horizonte.
El Camino Francés desde Sarria con tu perro es posible y maravilloso. Con planificación, cariño y respeto, disfrutaréis juntos de una experiencia inolvidable por los caminos verdes de Galicia.


